En Castilla, nos apasiona el aprendizaje de la lengua y la cultura españolas. Ofrecemos una variedad de cursos para todos los niveles, desde principiantes hasta avanzados, con el objetivo de ayudar a nuestros estudiantes a alcanzar sus metas lingüísticas.
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Según el Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas, todas las lenguas europeas se dividen en los seis niveles siguientes: A1, A2, B1, B2, C1, C2
Ofrece una base común para la enseñanza y la organización del material en libros de texto o exámenes en toda Europa. El Marco Común Europeo es la base para el diseño de los niveles de competencia lingüística, la organización del material didáctico para cada nivel y, en general, la finalidad y los objetivos de la enseñanza de cada lengua europea enseñada como lengua extranjera.
Describe de forma comprensible lo que el alumno necesita aprender para comunicarse en una lengua extranjera y qué destrezas le ayudarán a desenvolverse en cualquier situación, ya sea oral o escrita. También describe el entorno cultural del que forma parte la lengua.
Con el Marco Común Europeo se pueden evaluar fácilmente los conocimientos de cada alumno y determinar sus progresos en el aprendizaje de cualquier lengua extranjera más allá del sistema educativo del país en el que se habla como lengua materna.
Es capaz de comprender y utilizar expresiones cotidianas que le son familiares, así como frases sencillas destinadas a satisfacer necesidades concretas. Sabe presentarse a sí mismo y a otros, y puede hacer y responder preguntas sobre detalles personales como dónde vive, las personas que conoce y las cosas que posee. Puede relacionarse de forma sencilla siempre que la persona con la que habla hable despacio y con claridad y esté dispuesta a ayudar.
Discurso oral:
El alumno comprende instrucciones básicas o participa en conversaciones sencillas sobre temas cotidianos.
Comprensión escrita:
El alumno comprende noticias sencillas, instrucciones o información necesaria.
Producción de lenguaje escrito:
El alumno es capaz de rellenar formularios sencillos y tomar notas sobre horarios, fechas y lugares.
Es capaz de comprender frases y expresiones de uso frecuente relacionadas con ámbitos que le son directamente afines (por ejemplo, información personal y familiar muy básica, compras, geografía local, trabajo). Sabe comunicarse en tareas sencillas y cotidianas que requieran un intercambio directo y directo de información sobre cuestiones que le son conocidas y habituales. Puede describir en términos sencillos aspectos de su pasado, su entorno inmediato y cuestiones de necesidad inmediata.
Discurso oral:
El alumno es capaz de expresar opiniones o deseos de forma sencilla en un contexto de comunicación amistosa.
Comprensión escrita:
El alumno comprende información sencilla relacionada con ámbitos que le son familiares: por ejemplo, productos de consumo, letreros, libros o relatos breves sobre temas conocidos.
Producción de lenguaje escrito:
El alumno es capaz de rellenar formularios y escribir cartas o tarjetas sencillas con información personal.
Puede entender los puntos principales que se le presentan con claridad y sin desviarse del tipo de lenguaje común y que
se refieren a cuestiones que se plantean habitualmente en el trabajo, la escuela, el ocio, etc. Puede tratar situaciones
que puedan producirse durante un viaje a una zona donde se hable esa lengua. Puede producir textos sencillos relacionados con
con asuntos que conoce o que le conciernen personalmente. Puede describir experiencias y acontecimientos, sueños, esperanzas y ambiciones y dar razones y explicaciones concisas de sus opiniones y planes.
Discurso oral:
El alumno puede expresar de forma muy sencilla opiniones sobre temas culturales o abstractos, o dar consejos sobre asuntos personales. Comprende instrucciones o anuncios publicitarios.
Comprensión escrita:
El alumno comprende artículos sobre la vida cotidiana, así como el significado general de la información sobre la vida cotidiana y la vida personal y familiar.
Producción de lenguaje escrito:
El alumno puede escribir cartas o tomar notas sobre temas conocidos o predecibles.
Es capaz de comprender las ideas principales de textos complejos, tanto concretos como abstractos, incluidos los debates sobre cuestiones técnicas de su especialidad. Sabe conversar con un grado de soltura y espontaneidad que le permite comunicarse normalmente con hablantes nativos de la lengua sin que ello suponga una carga para ninguna de las partes. Es capaz de producir textos claros y detallados sobre temas diversos, así como defender un punto de vista sobre una cuestión concreta indicando los pros y los contras de las distintas opciones.
Discurso oral:
El alumno puede iniciar o unirse a un debate sobre un tema conocido, o apoyar un debate en torno a una variedad de temas.
Comprensión escrita:
El alumno es capaz de leer rápidamente un texto para buscar información y comprender instrucciones o consejos.
Producción de lenguaje escrito:
El alumno puede tomar notas mientras alguien habla o escribir una carta que incluya información sofisticada.
Es capaz de comprender una amplia variedad de textos extensos y con cierto nivel de exigencia, así como de reconocer en ellos sentidos implícitos. Sabe expresarse con fluidez y espontaneidad sin que a menudo parezca que busca la expresión adecuada. Sabe utilizar la lengua con flexibilidad y eficacia para fines sociales, académicos y profesionales. Puede producir textos claros, bien estructurados y detallados sobre temas complejos, demostrando un uso controlado de esquemas organizativos, conectores y dispositivos.
cohesión.
Discurso oral:
El alumno puede participar activamente en reuniones y seminarios relacionados con su trabajo o unirse a una conversación amistosa con fluidez, incluso cuando tenga que tratar temas desconocidos.
Comprensión escrita:
El alumno lee lo suficientemente rápido como para seguir un curso universitario. Puede leer artículos de periódicos y revistas o entender un poco más de correspondencia especializada.
Producción de lenguaje escrito:
El alumno es capaz de preparar un portafolio profesional, tomar notas precisas durante las reuniones o redactar un breve ensayo, lo que demuestra su capacidad de comunicación.
Comprende con facilidad casi todo lo que oye o lee. Sabe resumir información procedente de diversas fuentes orales o escritas, sintetizando argumentos y descripciones en una presentación coherente. Puede expresarse espontáneamente, con gran facilidad y precisión, distinguiendo sutiles matices semánticos incluso en situaciones especialmente complejas.
Discurso oral:
El alumno es capaz de dar consejos o hablar sobre temas complejos y especializados, comprender cualquier conversación y tratar con confianza las cuestiones problemáticas.
Comprensión escrita:
El alumno comprende documentos de todo tipo, correspondencia, cualquier texto en general, aunque el significado sea muy complicado.
Producción de lenguaje escrito:
El alumno puede escribir cartas sobre cualquier tema y tomar notas detalladas durante reuniones o discursos, con precisión y claridad.
